¿Qué es el lag del turbo?
Antes de sumergirnos en las estrategias implementadas por Mazda para combatir el retardo del turbo, es crucial entender qué es exactamente el famoso «lag del turbo». Este término se refiere al retraso en la respuesta del motor cuando se presiona el acelerador y se espera una aceleración inmediata, pero hay un retraso perceptible antes de que el turbo empiece a generar la potencia adicional esperada. Este fenómeno puede ser frustrante para los conductores que desean una respuesta instantánea al pisar el acelerador.
Estrategias para minimizar el retardo del turbo en Mazda
Hola a todos, en este artículo discutiremos algunas estrategias innovadoras que Mazda está implementando para optimizar el flujo de gases de escape y minimizar el retraso del turbo en sus vehículos.
Estrategias innovadoras de Mazda para la optimización del escape
El motor de cuatro cilindros en línea de 2,5 litros de Mazda, que se encuentra en el Mazda CX-9, ofrece un rendimiento impresionante con 250 caballos de fuerza a 5000 rpm y 310 libras-pie de torsión a 2000 rpm. Un factor clave que contribuye a este extraordinario rendimiento es la relación de compresión del motor de 10,5 a 1, que mejora la eficiencia.
Colector de escape corto

La primera estrategia de Mazda es simple pero efectiva: han diseñado un colector de escape corto. Al minimizar la longitud del colector antes de llegar al turbocompresor, la pérdida de energía y la disipación de calor en el sistema de escape se reducen significativamente. Esto permite que el motor retenga el máximo de calor y energía, lo que resulta en un mejor rendimiento.
Válvula de escape de geometría variable
Una característica única del sistema de escape de Mazda es el uso de una válvula de escape de geometría variable. Esta válvula, integrada en el colector de escape, desempeña un papel crucial a la hora de optimizar el rendimiento a diferentes velocidades del motor. A velocidades más bajas del motor (por debajo de 1620 rpm), cuando el flujo de escape es limitado, la válvula se cierra, redirigiendo los gases de escape a través de un camino más estrecho.
Esta restricción aumenta la velocidad del flujo de aire, lo que permite que el turbocompresor se acelere rápidamente y genere un impulso útil incluso a bajas revoluciones. A medida que la velocidad del motor aumenta más allá de 1620 rpm, la válvula se abre, lo que permite un mayor flujo de gas sin impedir el rendimiento.
Extracción optimizada con escape 4-1
La tercera estrategia que emplea Mazda es optimizar la evacuación, el proceso de eliminación de los gases de escape de los cilindros. El orden de encendido del motor de cuatro cilindros (1-3-4-2) constituye la base de esta estrategia. Para mejorar la evacuación de gases, Mazda ha diseñado el sistema de escape en una configuración 4-3-1. Esto significa que los gases de escape de los cilindros 1 y 2 están emparejados, y los cilindros 3 y 4 están emparejados.
Cuando el cilindro 1 dispara, genera gases de escape a alta presión. Al mismo tiempo, el cilindro 2 se prepara para iniciar su carrera de admisión. El pulso de alta presión del cilindro 1 crea un efecto de succión, extrayendo los gases de escape restantes del cilindro 2. Este fenómeno se repite con los cilindros 3 y 4, siempre emparejando el cilindro de baja presión al lado del cilindro de alta presión, creando una eficiente proceso de barrido.
Al implementar estas innovadoras estrategias de escape, Mazda ha logrado un rendimiento y una eficiencia impresionantes en su motor de 2,5 litros. Estas optimizaciones no sólo mejoran la respuesta del turbocompresor, reduciendo el retraso, sino que también mejoran el rendimiento general del motor y la eficiencia del combustible.
¡Gracias por leer y esperamos que estas estrategias te ayuden a comprender y reducir el lag del turbo en tu Mazda!