En caso de un pinchazo, el automóvil azul sobrevive y se detiene mientras que el automóvil rojo tiene un accidente fatal. La diferencia está en los neumáticos. El automóvil que se estrelló tiene neumáticos tubulares, mientras que el que sobrevivió tiene neumáticos sin tubo.
Neumáticos tubulares: El diseño tradicional
Los neumáticos tubulares son permeables al aire debido a su procesamiento químico, por lo que se les agrega un tubo de caucho impermeable por dentro. Sin embargo, si se pincha el tubo, el aire se escapa rápidamente. Si el suministro de aire está fijo en la llanta, el aire se atrapa entre el tubo y el neumático, causando una deflación lenta, pero esto puede llevar a una explosión del neumático debido a la alta presión.
Neumáticos sin tubo: Diseño más seguro
Los neumáticos sin tubo, por otro lado, utilizan un diseño de neumático y llanta combinado. No hay necesidad de un tubo de caucho adicional. En lugar de eso, se utiliza una cinta adhesiva especial alrededor del neumático. Cuando se pincha, la cinta adhesiva evita que la abertura se expanda, permitiendo que el aire escape lentamente en lugar de salir rápidamente. Además, los neumáticos sin tubo tienen un mecanismo de sellado automático con una solución de látex que repara agujeros pequeños.
El diseño asimétrico de la llanta
Para asegurar que el neumático sin tubo se ajuste adecuadamente a la llanta, se utiliza un diseño de llanta asimétrico. Esto permite que el neumático se ajuste sin problemas, proporcionando un bloqueo hermético para evitar fugas de aire.
Convertir neumáticos tubulares a neumáticos sin tubo
Es posible convertir neumáticos tubulares a neumáticos sin tubo, siempre y cuando la llanta tenga el diseño adecuado con una protuberancia que permita un bloqueo hermético. Sin embargo, se recomienda consultar con un especialista antes de realizar esta conversión.
¡Esperamos que hayas disfrutado de este artículo sobre neumáticos sin tubo! ¡Gracias por leer!