¡Hola a todos y bienvenidos! En este artículo, discutiremos las diferencias entre sobrealimentadores y turbocompresores desde un punto de vista de alto nivel. Exploraremos las ventajas y desventajas de cada opción. Aunque he cubierto tipos específicos de turbocompresores y sobrealimentadores en contenido anterior, quiero ofrecer una comparación general para ayudarle a comprender las razones para elegir uno sobre el otro. A partir de ahí, podrás profundizar en las opciones específicas que se adapten a tus necesidades.
Supercargadores versus turbocompresores: aumentar la potencia
Tanto los sobrealimentadores como los turbocompresores están diseñados para aumentar significativamente la potencia al proporcionar un aumento de presión adicional al motor. Sin embargo, lo logran de diferentes maneras. Un turbocompresor utiliza gases de escape para hacer girar una turbina, que acciona un compresor que aspira aire para el motor. Por otro lado, un sobrealimentador depende del propio motor, ya sea a través de engranajes o correas, para hacer girar un compresor y suministrar impulso al motor.
Ventajas de los turbocompresores
Los turbocompresores ofrecen varias ventajas, especialmente en términos de eficiencia. Hacen uso de los gases de escape que de otro modo se desperdiciarían y los convierten en un recurso útil, lo que le permite aspirar más aire y mejorar el rendimiento.
Los fabricantes suelen utilizar turbocompresores para reducir el tamaño de los motores, lo que permite altos niveles de potencia con un motor más pequeño y de menor consumo de combustible. Esta reducción reduce el peso y el consumo de energía, lo que hace que los turbocompresores sean populares en la industria automotriz.
Ventajas de los supercargadores
Los supercargadores tienen algunas ventajas propias. En primer lugar, no tienen ningún retraso en comparación con los turbocompresores. En lugar de depender de los gases de escape, los sobrealimentadores dependen únicamente de las RPM del motor, proporcionando potencia inmediata al acelerar. Además, los supercargadores se pueden ajustar para ofrecer un impulso amplio y lineal en todo el rango de RPM del motor, ofreciendo una potencia constante en todo momento.
Los sobrealimentadores de doble tornillo y de raíz, en particular, proporcionan un importante gruñido a bajas revoluciones, lo que los hace adecuados para aplicaciones como motores diésel.
Los inconvenientes: turbocompresores y sobrealimentadores
Desventajas de los turbocompresores
Los turbocompresores tienen algunos inconvenientes. En primer lugar, hay un retraso del turbo, un retraso en la entrega de potencia cuando se presiona el acelerador. Los turbocompresores necesitan un umbral de escape mínimo para producir impulso, y lleva tiempo hacer funcionar el compresor y alimentar el motor con aire.
Además, el control del acelerador puede ser un desafío en los automóviles turboalimentados, ya que es posible que la respuesta no coincida exactamente con la presión del pedal. Los turbocompresores también requieren lubricación con aceite de motor, lo que añade demanda y calor adicionales al aceite del motor.
Desventajas de los supercargadores
Los sobrealimentadores tienen la desventaja de utilizar la potencia del motor para generar más potencia, lo que resulta en una pérdida de caballos de fuerza. Si bien proporcionan un mayor flujo de aire, el proceso es menos eficiente en comparación con los turbocompresores que aprovechan la energía del escape. Sin embargo, desde la perspectiva de la respuesta, los sobrealimentadores sobresalen.
La respuesta del acelerador es inmediata y se correlaciona directamente con la posición de su pie, brindándole una experiencia de conducción conectada y atractiva. Además, algunos sobrealimentadores, como los de raíz y los de doble tornillo, no requieren lubricación con aceite, lo que reduce las limitaciones de aceite del motor.
Preferencia personal: turbocompresores frente a sobrealimentadores
Después de experimentar varios autos como periodista automotriz, encuentro que los sobrealimentadores son más divertidos de manejar debido a su respuesta instantánea y el control preciso que ofrecen a través del pedal del acelerador. Con un sobrealimentador, obtienes exactamente lo que pides cuando pisas el pedal.
Los automóviles turboalimentados, si bien son eficientes y están bien diseñados en muchos casos, pueden presentar cierto retraso y una entrega de par inconsistente. Sin embargo, existen fantásticos autos turboalimentados que brindan un mapeo del acelerador consistente y receptivo. En última instancia, todo se reduce a las preferencias personales y a la experiencia de conducción que busca.
¡Gracias por leer!